Siempre nos lo pasamos bien en las bodas y hacemos lo possible por llevamos muy bien con todo el mundo pero tampoco es que nos suelan aplaudir, y al terminar y recoger cámaras y trastos en la boda de Kike y Merche, cuando nos despedimos, nos hicieron la ola ….. supongo que la alta hora que era y la barra libra de gin-tonics tendría algo que ver, pero lo cierto es que nos fuimos con una sensación de triunfo tremenda.
Fiesta, fiesta y más fiesta, eso fue la boda de Kike y Merche, con una pareja tan divertida y simpática y unos invitados tan festivaleros y fiesteros durante todo el día la verdad es que no podía ser de otra manera.
La ceremonia fue civil y muy divertida con música en vivo y muy emotiva con lagrimillas y todo, durante el Coktail al aire libre la gente no dejó de disfrutar al igual que durante la noche y la barra libre a la luz de la luna.
Todo tuvo lugar en Finca La Dehesa, garantía de éxito y con un trato genial (Bravo por Patricia)